Menorca es un destino ideal para quienes buscan playas vírgenes y tranquilidad. En el norte de la isla, se encuentran calas que ofrecen paisajes impresionantes y menos afluencia turística. A continuación, te presentamos una guía detallada de las mejores calas del norte de Menorca.
El norte de Menorca destaca por su costa escarpada y natural, perfecta para aquellos que desean disfrutar de la naturaleza en su estado más puro. Estas calas ofrecen vistas espectaculares del Mediterráneo y un entorno prácticamente intacto.
A diferencia del sur, las calas del norte son menos frecuentadas, lo que las convierte en el refugio perfecto para quienes buscan paz y relajación, incluso durante la temporada alta.
Cala Pregonda es famosa por su arena dorada y aguas azul profundo. Este paisaje único, con islas rocosas que protegen la cala, es ideal para practicar snorkel y disfrutar de la tranquilidad del mar.
Dentro de la Reserva Marina del Norte se encuentra Cala Tortuga, una cala virgen perfecta para aquellos que buscan una experiencia más exclusiva. Aunque su acceso es un poco complicado, vale la pena por la tranquilidad que ofrece.
Situada junto al Faro de Cavalleria, Cala Cavalleria combina historia y belleza natural. Sus aguas claras y su arena fina roja la convierten en una visita obligada para quienes desean disfrutar de Menorca en todo su esplendor.
Cala Pilar es ideal para los aventureros que no temen una caminata de 45 minutos para llegar a una de las calas más espectaculares de la isla. Aquí, la naturaleza se presenta en su forma más pura, ofreciendo un paisaje impresionante.
Las Playas de Algaiarens son dos amplias calas con un entorno natural inigualable. Su acceso fácil las convierte en una opción ideal para familias o aquellos que buscan comodidad sin sacrificar belleza.
Cala Rotja es menos conocida y ofrece un entorno tranquilo y pacífico. Sus aguas claras y entorno rocoso son perfectos para quienes buscan desconectar completamente.
Playa de Binimel·là ofrece un entorno agreste y salvaje. Su fácil acceso y la presencia de un chiringuito cercano la hacen ideal para pasar un día completo disfrutando de la playa y una buena comida.
Cala Mica es conocida por su entorno salvaje y natural. Aunque su acceso es sencillo, su ubicación remota asegura una experiencia más auténtica y menos concurrida.
Cala Sa Mesquida es una playa amplia y tranquila, ideal para familias. Sus aguas poco profundas y su entorno natural proporcionan un refugio perfecto para relajarse.
Cala Tirant es otra excelente opción para familias, con aguas tranquilas y una playa espaciosa. Su fácil acceso y los servicios cercanos la convierten en un lugar perfecto para disfrutar del sol y el mar con comodidad.
Muchas de las calas del norte son accesibles en coche, con aparcamientos cercanos. Es recomendable llegar temprano, especialmente en temporada alta, para evitar aglomeraciones.
Para los amantes del senderismo, el Camí de Cavalls es una excelente opción para acceder a calas remotas y disfrutar de vistas panorámicas mientras exploras la isla.
Es importante llevar todo lo necesario, como agua, comida, protector solar y una bolsa para recoger los residuos, especialmente en calas sin servicios cercanos.
Los mejores meses para visitar las calas del norte son de mayo a octubre, cuando el clima es perfecto para disfrutar del mar y el sol.